Entre los
9 y 10 años los niños/as se encuentran en la preadolescencia. Las niñas suelen
ser más maduras que los niños, ellas ya suelen reivindicar una autonomía a la
hora de vestir, comienzan a tener amigas más íntimas y por lo tanto
preferencias en las amistades. En cambio los niños siguen sin mostrar esas
preferencias en las amistades, juegan mucho en grupo comprendiendo ya el
significado de cooperación y juego en equipo, siguen jugando a juegos más
infantiles, hacen mucho de rabiar a las niñas, etc.
Los
niños/as ya empiezan a guiarse más por su propia autoridad que por la que sus
padres les imponen, es decir, empiezan a querer decidir por sí mismos.
Comienzan a configurar su personalidad y podemos ver las cualidades y actitudes
que destaca en cada uno/a.
Están cargados de energía, por ello
es conveniente dejar que se relajen después de realizar una actividad muy
movida y antes de comenzar una tarea escolar para que recuperen el poder
concentrarse en la tarea.
Se debe aprovechar el gran interés
que sienten por la escuela en esta etapa, para ellos/as es un mundo agradable
por el cual están totalmente absorbidos ya que gozan aprendiendo cosas nuevas
puesto que tienen muchas inquietudes y les entusiasma conocer cosas que
desconocen.
En esta etapa el principal vehículo
de conocimiento del niño es la palabra, oral y escrita. La memoria auditiva
está menos desarrolla que la visual, por lo tanto aprenden mejor a través de
las cosas que puede ver.
En lo referido
al desarrollo intelectual se puede destacar el contar mentalmente, solucionar
problemas con diferentes operaciones matemáticas, comprender causa-efecto,
extraer conclusiones tras reflexionar y razonar, etc.
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